La inteligencia artificial (IA) ofrece herramientas para la escritura que pueden resultar beneficiosas y ayudarnos a adquirir competencias y utilizarlas éticamente. Hoy en día, podemos enseñar a trabajar eficazmente con la IA en la generación de ideas al realizar tareas de escritura.
La IA, representada en sistemas como ChatGPT, ha sido entrenada para responder preguntas y seguir instrucciones específicas de escritura. Puede escribir en diferentes tonos y estilos, ya sea en tono humorístico, familiar, profesional o ingenioso, e incluso puede imitar el estilo de Shakespeare. Existen varios sistemas de IA como Copy.ai, Rytr, Peppertype, Copysmith, Writesonic, Youchat, ASKtoAI, Dupla y Magic Write que ofrecen estas capacidades.
En cuanto a la creatividad, la IA supera a la inteligencia humana en fluidez y flexibilidad en algunas pruebas de imaginación creativa. Esto se debe a que la IA tiene acceso a una gran cantidad de información, más allá de lo que una persona puede manejar, lo cual es esencial en el proceso creativo. Sin embargo, en pruebas de originalidad narrativa, la IA muestra menos creatividad que los estudiantes universitarios. Esto se debe a que la IA no puede distanciarse de las instrucciones dadas y no es capaz de concebir respuestas sorprendentes o alejadas de lo evidente.
A pesar de las ventajas de la IA en la escritura, no puede reemplazar la inteligencia y creatividad humana. La IA es un medio, no un fin, y la colaboración entre humanos y máquinas es necesaria para aprovechar al máximo su potencial. La IA carece de criterio y el ser humano debe actuar con responsabilidad y criterio al utilizarla. Además, la IA debe ser una herramienta en manos del profesorado, y no sustituirlo en el proceso educativo.
En definitiva, la escritura con ayuda de la IA requiere un replanteamiento de la educación y la creatividad. El profesorado debe enseñar a los alumnos a utilizar la IA como punto de partida, pero no como resultado final. La información proporcionada por la IA debe ser revisada críticamente y la forma en que la IA escribe debe ser personalizada y contextualizada.
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