Microsoft, el Instituto Alexander von Humboldt, el Instituto Sinchi y la Universidad de los Andes han lanzado el proyecto Guacamaya, una iniciativa que utiliza tecnología avanzada para el monitoreo y conservación de la Amazonía.
El objetivo principal de este proyecto es establecer un modelo integral que brinde una visión más completa y profunda de la región amazónica. Este modelo permitiría realizar un monitoreo constante de la selva y su biodiversidad, identificar posibles amenazas, generar datos valiosos para políticas de conservación, respaldar proyectos de producción sostenible y compartir conocimientos.
Todo esto sería posible gracias al uso de servicios de inteligencia artificial, convirtiendo a Guacamaya en un protector invaluable de esta región.
La información es esencial para avanzar en la ciencia y la conservación, pero a menudo los datos recopilados por diferentes instituciones y organizaciones están dispersos y requieren una gran capacidad computacional para su procesamiento. Guacamaya aborda este desafío al recopilar, limpiar y estandarizar datos de diversas fuentes, utilizando algoritmos de inteligencia artificial desarrollados por la Universidad de los Andes y Microsoft para agilizar y mejorar la investigación científica.
El proyecto se basa en tres fuentes de información: datos bioacústicos, cámaras trampa e imágenes satelitales. Los datos bioacústicos se recopilan mediante dispositivos autónomos que registran sonidos en los bosques tropicales y permiten monitorear la biodiversidad. Los algoritmos de Guacamaya procesan miles de horas de grabaciones para identificar especies, detectar amenazas y analizar el impacto de actividades humanas como la tala ilegal.
Las cámaras trampa capturan imágenes de la fauna en su hábitat y son esenciales para documentar especies raras y en peligro. A través de la inteligencia artificial, Guacamaya ha desarrollado un modelo que identifica animales con hasta un 90% de precisión, permitiendo analizar automáticamente diez veces más datos y acelerar la obtención de informes.
Finalmente, las imágenes satelitales son utilizadas para detectar áreas deforestadas. Los algoritmos de Guacamaya procesan estas imágenes con precisión y se está desarrollando un algoritmo para mejorar la medición de las áreas devastadas.
Este proyecto representa un gran avance en el monitoreo y conservación de la Amazonía, brindando herramientas tecnológicas que permiten una gestión más eficiente de la biodiversidad y la formulación de políticas basadas en datos. Se espera que esta iniciativa inspire a más personas y países a utilizar la tecnología para proteger este ecosistema vital para el planeta.
Fuentes:
– Microsoft
– Instituto Alexander von Humboldt
– Instituto Sinchi
– Universidad de los Andes