El Ejército del Aire de EE.UU. ha solicitado una asignación presupuestaria multimillonaria para investigar y construir aviones no tripulados controlados por pilotos de inteligencia artificial (IA). Según los planes del servicio, se busca obtener 5.800 millones de dólares del presupuesto para adquirir al menos mil aviones experimentales que puedan volar sin piloto gracias a la IA.
El avión experimental XQ-58A Valkyrie ha sido un avance revolucionario en la industria aeronáutica. Impulsado por un motor cohete, cuenta con la capacidad de volar largas distancias y transportar misiles que pueden alcanzar objetivos más allá de su alcance visual. Además, está controlado por sistemas de IA avanzados, lo que lo convierte en pionero en la exploración de esta tecnología emergente por parte del Ejército del Aire.
El Valkyrie tiene como objetivo identificar y evaluar amenazas enemigas utilizando sus sofisticados sensores y algoritmos de IA. Este sistema autónomo puede responder rápidamente a peligros potenciales, participando en operaciones de combate con la aprobación humana. Esto promete mejorar la eficiencia y eficacia de las operaciones militares, minimizando los riesgos humanos en entornos peligrosos.
En un ejercicio en la base aérea de Eglin, en Florida, el mayor Ross Elder tuvo la oportunidad de volar junto al Valkyrie y demostró el potencial de la colaboración humano-robot en los cielos. A medida que se siguen realizando pruebas y evaluaciones, se espera que la integración de aviones controlados por IA revolucione el combate aéreo.
Además del Valkyrie, también se ha iniciado el Proyecto Venom, que consiste en equipar seis cazas F-16 con software de IA para tomar decisiones clave durante las misiones. El objetivo es crear una Fuerza Aérea más impredecible y letal, como estrategia de disuasión ante movimientos de China.
Fuentes:
– The New York Times.